miércoles, 22 de febrero de 2006

Los de siempre y lecciones con Wenger

Marcaron Henry, Schevchenko, Ballack y Juninho en un alarde de originalidad. Woodgate se lesionó y Gattuso intentó forzar una expulsión echándole cuento. Lo de siempre pero entre semana.
Mientras, Wenger ha impartido magisterio de cómo plantear un partido en el que toda su defensa titular estaba lesionada y en el que todos esperaban una goleada, porque quien más quien menos pensaba en un 3-0 fácil después de las invocaciones de la Copa. Wenger ganó el partido donde se han ganado siempre aunque hace tiempo que no se dice en voz alta, en el centro del campo. Ahí se ahogó el Madrid, el miedo escénico, el espíritu de Juanito, el marketing, los galácticos y todo lo demás, incluso Raúl, comodín de las noches mágicas del Bernabeu. Cinco jugadores y Henry arriba, sin balón se replegaban, con balón salían como flechas Reyes y Henry, y un poco menos Ljunberg. Sin dobles pivotes, trivotes, cuadrados mágicos, tres puntas ni verborrea de banquillo para justificar el cargo. Fácil y vertical. Al final aún dieron gracias por haber encajado sólo uno. ¿Habrá remontada en Highbury?
Categorías: